Ingredientes (para 6-8 personas):
- 8 ciruelas rojas grandes o 14 pequeñas
- 4 huevos
- 220 gr. de azúcar
- 150 gr. de harina de repostería
- 50 gr. de almendra en polvo
- 1 sobre de levadura Royal (impulsor)
- 100 ml. de aceite de girasol
- 1 yogur natural cremoso (griego)
- 90 gr. de queso fresco
- un chorrito de ron o brandy
- mantequilla
- una pizca de sal
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180ºC.
Engrasamos un molde redondo con mantequilla.
Batimos los huevos, el azúcar y una pizca de sal hasta que doble su volumen o se blanqueen.
Por otro lado, desmigamos el queso fresco con ayuda de un tenedor y lo añadimos al huevo batido junto con el yogur natural, el aceite de girasol y el chorrito de ron. Mezclamos hasta que se integren bien en la mezcla.
Tamizamos la harina junto con la levadura y juntamos con la almendra molida. Incorporamos a la mezcla anterior suavemente con movimientos envolventes. Pelamos, troceamos la mitad de las ciruelas y las añadimos a la masa.
Vertemos la masa al molde y colocamos sobre la superficie la otra mitad de las ciruelas (sin hueso y cortadas en láminas).
Horneamos durante 40-45 minutos (dependiendo el tipo de horno estará más o menos tiempo). Para saber que está hecho, simplemente pinchamos con un brocheta en el centro del bizcocho y si la brocheta sale limpia, nuestro pastel está listo.
Sacamos del horno y dejamos templar antes de desmoldarla. Una vez desmoldada, la dejamos enfriar sobre una rejilla.
Terminamos abrillantando el bizcocho con mermelada de ciruelas aligerada con un poco de agua templada.
