Tenemos que decir que esta receta cuando la vimos nos enamoro. Hemos cogido como base un plato de Jordi Roca. Nos imaginamos que ya le conocéis, pero para el que no le conozca decirle que es uno de los reposteros más reconocidos a nivel mundial.
Junto a sus otros dos hermanos regenta el mejor restaurante del mundo (el celler de can roca en Girona).
Bueno dicho todo esto nos ponemos el delantal y nos ponemos con el mojito.
Ingredientes (para 5-6 mojitos):
Para el bizcocho genovés:
2 huevos
60 gr. de azúcar
60 gr. de harina
Para la sopa de lima:
75 gr. de agua
75 gr. de azúcar
150 gr. de zumo de lima o zumo de limón
½ sobre de agar agar (1,5 gr. de agar agar)
Para la gelatina de menta:
150 ml. de agua
un manojo de menta
65 gr. de azúcar
1 hoja de gelatina
Para emborrachar el bizcocho:
ron
Elaboración:
Para el bizcocho genovés, batimos los huevos con el azúcar hasta que doblen su volumen. Tamizamos la harina y la incorporamos a los huevos suavemente.
Sobre una bandeja de horno cubierta con papel vegetal, extendemos la masa de bizcocho. La bandeja no debe de ser muy grande ya que tenemos poca cantidad de masa.
Precalentamos el horno a 180ºC y horneamos durante 9 minutos. Sacamos del horno y dejamos templar.
Para la sopa de lima, comenzamos preparando un almíbar con el agua y el azúcar. Cuando comience a hervir, vertemos el zumo de lima. Dejamos que coja temperatura. Añadimos el agar agar en forma de lluvia, removemos hasta que esté a punto de hervir y retiramos del fuego.
Colocamos la sopa de lima en un tupper y dejamos templar antes de meter en la nevera. Metemos en la nevera y dejamos que coja cuerpo al menos durante 4 horas. Si es un día, mejor.
Para la gelatina de menta, hidratamos la hoja de gelatina en agua fría durante 5 minutos, escurrimos y reservamos la hoja.
Deshojamos la menta, quedándonos con las hojas.
En un cazo ponemos a hervir el agua y escaldamos durante 10 segundos las hojas de menta. Seguido refrescamos las hojas en un bol con abundante agua fría con hielos. Reservamos el agua del escaldado.
Introducimos las hojas de menta escurridas junto con el agua del escaldado en un vaso americano. Trituramos hasta conseguir un caldo. Colamos este caldo por un colador fino y lo vertemos en un cazo junto con el azúcar. Llevamos a ebullición, retiramos del fuego y le incorporamos la hoja de gelatina hidratada. Removemos hasta que se disuelva y lo colocamos en un tupper.
Dejamos templar antes de meter a la nevera. Dejamos que coja cuerpo en la nevera al menos durante 4 horas. Lo ideal sería dejarlo un día.
Montaje:
Con un cortapastas o aro cortamos discos de bizcocho. Colocamos estos discos en la base de un vaso y lo emborrachamos con un chorrito de ron. Sobre el bizcocho vertemos la sopa de lima y encima, con ayuda de una cuchara, ponemos la gelatina de menta. Acabamos espolvoreando un poco de azúcar moreno y colocando un cogollo de menta.
