Ingredientes (para 4 personas):
- 4 rebanadas de pan (pan de cebolla de Gure Ogia)
- 100 gr. de pipas de girasol (sin sal)
- 40 gr. de rúcula
- ¼ de cebolleta (50 gr.)
- zumo de ½ limón
- 30 gr. de aceite de oliva virgen extra
- 20 gr. de agua
- sal marina y pimienta blanca
Elaboración:
Introducimos en el vaso de la batidora las pipas de girasol, la rúcula, la cebolleta troceada, el zumo de limón, el agua, una pizca de sal, pimienta blanca y el aceite de oliva virgen extra.
Trituramos hasta conseguir una pasta homogénea.
Lo ponemos a punto de sal y pimienta, y lo colocamos en un cuenco. Tapamos con papel film, procurando que el papel film esté en contacto con el paté. Metemos en la nevera y dejamos al menos 2 horas.
Tostamos ligeramente las rebanadas de pan.
Montaje:
Metemos el paté de rúcula en una manga pastelera con boquilla rizada y colocamos sobre las rebanadas de pan. Y ponemos encima unas pipas de girasol y unas hojas de rúcula (opcional).
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